En este tiempo estuve un largo período alejado de las mesas, pero a partir de estas navidades empecé de nuevo a aparecer por partidas de este maravilloso juego.
Así comencé con los colegas del insti a echar las típicas partidillas para echar el rato, hasta que un día volví a KJ. Empezaba una nueva temporada, con sit and go de 2 mesas, cosa que me atrajo a volver por aquel máldito lugar (para mi, por los bab-beats recibidos).
Se dispuso como se preveía, un par de mesitas cortas de 6/7 jugadores cada una. Me tocó en una mesa con jugadores como Luís, Angona, Sebas, Rubén & Eu. En una de las primeras manos, volvió a mi pensamiento aquella pesadilla: el bad-beat. Tras un flop aparentemente tranquilo, en el que me veía ganador con QQ, Eu decide meter all in hablando antes que yo. A mi me parece que vió mi subido con AX, por lo que no le creo y le pago. Como no, acierto llevando éste la mano KJ. El turn me deparó un rey para caer con mala suerte, por lo que hice mi recompra doble.
Tras la recompra gané varias manos y sólo tuve un encontronazo con Rubén. Me hizo full a all in pre-flop con 109, mano que decía con la que no se podía tirar y que le daba un sentimiento especial (jeje). Aunque perdí, manos después tuve otra mano cruzada con él, en la que hice un tremendo bad beat tanto a él como a Angona. Perdí un bote insignificante con respecto al secundario que era el creado por éstos dos, lo que me puso muy bien de fichas.
Poco después se creo la mesa final, en la que quedé 5º, después de que Waderls me echara.
Ésto fue el recuerdo que me dejó el torneo.
Inmediatamente me pongo con otra entrada, espero que igual de interesante que ésta.
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